Luego de ocurrir un cataclismo, sus sobrevivientes buscan volver a la normalidad. La pandemia de COVID-19 que el mundo entero transita es un ejemplo de esto; sin embargo, este caso tiene una diferencia importante con otros fenómenos naturales y sociales que han puesto a prueba a la humanidad a lo largo de su historia, pues esta vez nos enfrentamos a un enemigo invisible y resiliente que, para vencerlo, ha obligado a las personas a modificar sus hábitos y decisiones cotidianas.
El ingreso a lo que se ha denominado la nueva normalidad, está implicando reanudar actividades laborales y sociales de manera escalonada, de acuerdo con los criterios de las autoridades de salud y economía, quienes se encargan de clasificar actividades como esenciales y no esenciales.
Muchos de los retos que se derivan de esta nueva realidad pueden resolverse mediante la aplicación de tecnología, por lo que, en este escenario, los profesionales de la ingeniería y específicamente del campo de la cibernética electrónica están tomando especial relevancia, consideró el Dr. Luis Básaca, Docente Investigador de Tiempo Completo del programa de Ingeniería en Cibernética Electrónica (ICE) de CETYS Universidad Campus Mexicali.
“Esta ingeniería abarca un amplio campo del conocimiento que brinda excelentes oportunidades en las cuales un profesional en ICE puede aportar soluciones tecnológicas innovadoras, ya que puede aplicar sus conocimientos en electrónica y desarrollo de software para diseñar aplicaciones o sistemas que ayuden a generar un entorno más seguro para nuestra sociedad, tanto física como digitalmente”.
La intervención de los profesionales en esta disciplina tiene un gran impacto en múltiples sectores. Uno de los más importantes es el de la salud, en el que un ICE es capaz de desarrollar sistemas automatizados para ofrecer a los pacientes asistencia respiratoria de emergencia, los cuales han sido indispensables durante la pandemia.
En el ámbito de las telecomunicaciones, los especialistas en cibernética electrónica se han encargado de desarrollar aplicaciones para teléfonos móviles, que utilizan información de sensores internos como posicionamiento global diferencial móvil y tecnología bluetooth para detectar otros dispositivos, ayudando a los usuarios a calcular la distancia aproximada entre ellos y emitir una alerta de proximidad para recordarle mantener una sana distancia.
Aunque las anteriores son dos de las más destacadas, las áreas de oportunidad para un profesional en ICE no están limitadas, precisó el académico. El desarrollo de la telemedicina, la cual consiste en la prestación de servicios médicos a distancia utilizando tecnologías de información y de comunicación; la automatización de sistemas de sanitización y la manipulación de residuos peligrosos a través del control a distancia de brazos robóticos, son ejemplos de otras de sus aportaciones.
“Estas aplicaciones son sólo algunos ejemplos de problemas a los que ya nos estamos enfrentando como sociedad, y que seguramente seguirán surgiendo en torno a la nueva normalidad”.
A cargo del también Investigador Nacional Nivel 1 del Sistema Nacional de Investigadores del CONACYT, Dr. Luis Básaca, estudiantes de ICE de CETYS trabajan en el desarrollo de un sistema de control de acceso de personas con medición automática de temperatura corporal no invasiva, que al culminarse, podrá ser aplicado tanto en instituciones educativas como en la industria y en espacios de trabajo para asegurar un acceso seguro, controlado y cumpliendo con las medidas de prevención establecidas.
“En la Escuela de Ingeniería de CETYS Universidad hacemos nuestra parte, formando profesionales de ICE listos para enfrentarse a estos nuevos retos y para solucionarlos haciendo un uso innovador de la tecnología”, concluyó el académico.