México sigue avanzando en aspectos de facturación y contabilidad electrónica, no obstante, es necesario hacer actualizaciones que permitan una mayor eficiencia y transparencia fiscal y que ayuden a que las empresas de transporte tanto de carga como de pasajeros, cuenten con información real y precisa.
En este sentido, en enero de 2017 el SAT dio a conocer los cambios técnicos que complementarán la información que se registra en la emisión de los Comprobantes Fiscales Digitales por Internet (CFDI) versión 3.3 y cuya obligatoriedad iniciará el 1° de diciembre para todas las empresas sin importar su tamaño.
En el caso de los servicios de transporte y logística, deben también estar atentos para poder facturar sus servicios apegándose a los nuevos requerimientos fiscales y homologar sus conceptos con los catálogos del SAT. Por señalar un ejemplo, los servicios de transporte terrestre podrán ser clasificados por distancia (KMT), por peso transportado (KGM), por pasajero/asiento (IE persona), o por viaje (E54)”, conceptos en los que será necesario incluir la clave de unidad de medida de acuerdo al tipo de servicio y del giro del proveedor que darán validez al CFDI para que sea válido en términos fiscales.
Luis Velasco, Estratega Contable de Aspel, explica que esta modificación afectará la información registrada en los CFDI que las empresas usen para dar parte de su catálogo de cuentas, de la balanza de comprobación y de la información de pólizas y auxiliares. “El primero se refiere a los conceptos que cada empresa maneja y tiene relación con el código agrupador del SAT. Éste debe enviarse en una sola ocasión o en la medida en que los nombres, claves a las cuentas de activos, pasivos, ingresos, costos, gastos u otros vayan cambiando. En cambio, la balanza de comprobación debe enviarse mensualmente y en ella se deben agrupar los datos contables de la empresa como saldos, cuentas bancarias, activos, nómina, junto con sus afectaciones y variaciones”.
Es relevante señalar que la información sobre las pólizas y auxiliares sólo debe compartirse cuando la autoridad requiera verificar los datos o conocer la procedencia de devoluciones y compensaciones.
Es muy importante que las compañías se preparen para cumplir con esta nueva obligación fiscal a través de soluciones tecnológicas que automatizan el llenado de comprobantes, realizan estados y reportes financieros por año o periodos, manejan presupuestos, hacen seguimiento fiscal y permiten enviar oportuna y automáticamente las declaraciones, entre otras tareas.
“Nuestra apuesta es proveer soluciones con interfaces sencillas para las empresas. En ese sentido, COI, Sistema de Contabilidad Integral, procesa, integra y actualiza la información de acuerdo con las disposiciones fiscales vigentes. Así, la pyme puede beneficiarse con una herramienta que mantenga al día su registro contable, le permita agregar hasta 999 empresas (proveedores y clientes), consultar el catálogo de cuentas a los que se han agregado más campos y controlar y administrar gastos corporativos, como en el caso de las empresas de transporte y los viáticos de sus conductores”, señaló Velasco.