De aprobarse la reforma fiscal en los términos planteados por el Ejecutivo Federal, “afectaría de forma importante y en sentido negativo, la operación, logística y sistemas de nuestras empresas armadoras de autobuses, camiones, tractocamiones ubicadas en territorio nacional”, comentó el Presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), Miguel H. Elizalde Lizarraga.
“De manera específica nos referimos a la reforma contenida en el artículo 25 de la Ley del IVA que propone gravar con este impuesto a las importaciones de material de ensamble y de maquinaria y equipo que se importan mediante el depósito fiscal automotriz, lo cual obligaría a los fabricantes de vehículos pesados en México a pagar el IVA en la aduana de entrada, aún cuando las importaciones fueran temporales”, explicó el directivo en su boletín mensual.
“Lo anterior, a diferencia del régimen que ha venido operando por más de 22 años, a través del cual se puede diferir el pago del IVA en la importación, para pagarse en el momento en el que las empresas armadoras conocen el destino de los vehículos fabricados (mercado nacional o internacional)”.
Elizalde precisó que la reforma señalada afectará considerablemente el flujo de efectivo y la operación de comercio exterior, al hacer inoperantes las autorizaciones de depósito fiscal automotriz que hoy tienen las empresas armadoras, y que otorgaban seguridad en la planeación de operaciones, puesto que se otorgaban por un plazo de entre 5 y 10 años.
“Por ello, continuaremos el diálogo con el Ejecutivo Federal a través de las Secretarías de Economía y de Hacienda y Crédito Público, así como con el Poder Legislativo, para lograr que las medidas del paquete hacendario no afecten a una industria que acumula el 5.2% del PIB manufacturero, genera más de 144 mil empleos, mantiene a México como el cuarto exportador y el séptimo productor a nivel mundial, y mueve el 56% de la carga y el 97% del pasaje a nivel nacional.
“Quienes formamos parte de ANPACT, al igual que las 14 empresas asociadas, consideramos que estamos a tiempo de buscar alternativas que, sin contravenir el interés público, permitan que esta industria pueda seguir siendo bandera de calidad y trabajo, generadora de empleos bien pagados y factor indispensable para el crecimiento económico, para poder seguir moviendo a México adelante”.