Debido a que empiezan a proliferar los contribuyentes que utilizan amparos para importar vehículos usados de Estados Unidos a México, Alberto Real Benítez, Administrador General de Auditoría Fiscal del Servicio de Administración Tributaria (SAT) hizo un llamado a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para establecer un criterio en la materia.
Durante su visita a la Junta de Consejo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) correspondiente a septiembre, el funcionario afirmó que el SAT tiene bien identificadas a las empresas y personas que introducen unidades usadas extranjeras pagando impuestos pero, sobre todo, a las que lo hacen vía amparos.
No obstante que esta dependencia no está facultada para impedir la operación de los amparos, sí está obligado a verificar el cumplimiento de todas las disposiciones fiscales, por lo que por esa vía se han dado de baja temporal a importadores amparados, informó AMDA.
“Hay algunos que están amparados y no podemos hacer nada, sin embargo estamos trabajando por vías secundarias generándoles actos de fiscalización para verificar si están cumpliendo o no con sus impuestos y si están al corriente de sus obligaciones de comercio exterior, ya que esto les generaría su baja del padrón de importadores”.
Aunque Real Benítez reconoció que solicitarte a la Corte que fije su posición sobre los amparos es el camino más largo para resolver este fenómeno, esto no debería ser problema para la Corte debido a la claridad con que fueron publicados los decretos sobre la materia.