Las negociaciones entre los gobiernos de Estados Unidos y México para abrir la frontera norte al paso de camiones mexicanos a territorio estadounidense, comenzarán a tomar un nuevo curso luego de que el Departamento de Transporte del país vecino busca revivir los esfuerzos para cumplir con una provisión clave del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
De esa manera, se busca impulsar un nuevo régimen de inspección y vigilancia para permitir el transporte de larga distancia de camiones mexicanos por las carreteras de Estados Unidos, tras años de retrasos por preocupaciones de seguridad y disputas políticas, según dio a conocer la agencia Reuters.
Cabe recordar que sindicatos estadounidenses de transportistas se han manifestado en contra de la presencia de camiones mexicanos en las carreteras estadounidenses, por temor a la pérdida de empleos. Por ello, en la actualidad los camiones nacionales deben descargar sus bienes cerca de la frontera donde los camiones estadounidenses recogen las cargas y las transportan el resto del trayecto.
El subsecretario de Transporte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Humberto Treviño, calificó la medida como un punto de arranque «importantísimo». El funcionario señaló que los aranceles que México impuso el año pasado a algunos productos de Estados Unidos en respuesta a la demora en avanzar con el programa de camiones, podrían ser retirados una vez que se alcance un acuerdo.
«Si eventualmente llegamos a un acuerdo entre los países que ya restablezca esta posibilidad de la entrada de transportistas mexicanos a los Estados Unidos dentro del Tratado de Libre Comercio, por supuesto estaremos de la mejor disposición de levantar sanciones económicas a la exportación», dijo Treviño a Reuters.