La Asociación Mexicana de Arrendadoras de Vehículos (AMAVe) reportó 225,724 unidades arrendadas por los socios al cierre del segundo trimestre (2T) del 2020, lo que representa un crecimiento del 19% comparado con el 2T del 2019.
Uno de los segmentos con mayor crecimiento durante este periodo fue el del transporte de carga al presentar un aumento del 16% versus el 1T 2020 y un 47% comparado contra el 2T 2019, lo que representa un total de 6,818 unidades al día de hoy, esto debido a la incursión de un nuevo socio, renovación de flota y demanda del mercado.
El 73% de estas unidades se encuentran con arrendamiento puro, esquema que creció 2% contra el trimestre pasado. Sin embargo, la complicada situación que se vive en el país ocasionó que el arrendamiento financiero y la renta diaria tuvieran una disminución del 23% y del 8% respectivamente.
Estos datos refuerzan la postura de la AMAVe al presentar al arrendamiento vehicular como un fuerte aliado en la recuperación del país.
Mauricio Medina, presidente de la AMAVe, afirma que “estamos conscientes de la grave situación económica que enfrenta México y el resto del mundo como resultado de la contingencia sanitaria por el COVID-19, el arrendamiento vehicular es una eficiente forma de contrarrestar los graves efectos económicos, se trata de un esquema flexible con bajos costos y tiene además beneficios fiscales, así también es importante destacar el crecimiento en el arrendamiento de transporte de carga, el cual, es un indicador de que el país está en miras de recuperación y que este esquema es indispensable por ser la columna vertebral de las cadenas de suministros de muchas actividades esenciales, entre ellas la distribución de medicamentos y alimentos de la canasta”.
Este esquema permite hacer frente a las exigencias del mercado sin necesidad de descapitalizarse, además de que al menos durante este 2T 2020 se generaron más de 30,000 empleos indirectos, por lo que la industria del arrendamiento vehicular en México es de suma importancia para el desarrollo del país.