Con una estrategia basada en el incremento del valor agregado de las unidades de la marca, reducción de la dependencia del Euro, apoyo y monitoreo de la proveeduría in situ, Volkswagen de México (VW) busca mayores oportunidades en el mercado mexicano y crecer en Norteamérica.
A decir del responsable de Relaciones Públicas y Asuntos de Gobierno de VW de México, Thomas Karig, todavía es difícil, a seis meses de 2010, hacer un pronóstico de ventas, debido “al decepcionante comportamiento del mercado mexicano”.
Pese a que México juega un papel muy importante en la operación de la empresa en la región, donde la firma germana ha realizado inversiones por mil millones de dólares, hace falta que el país avance en las reformas estructurales que le permitirán mejorar los índices de producción y ventas.
Por el momento cualquier pronóstico resulta aventurado, sobre todo si se compara con países como Estados Unidos, Brasil y algunos países de Europa. Sin embargo, “no tiene ningún caso lamentarse, es hora de trabajar en los cambios necesarios para que la economía del país repunte.
“Este es un tema que no puede aislarse de la problemática general del país donde el crecimiento de la industria automotriz se basa en las exportaciones que son las que responden y no en el fortalecimiento del mercado interno, el cual avanza con lentitud”.
Durante la clausura de los trabajos del VIII Congreso Internacional de la Industria Automotriz en México (CIIAM), Thomas Karig, también hizo un llamado a los representantes de la Industria Nacional de Autopartes (INA) para conjuntamente con las autoridades correspondientes, crear los mecanismos necesarios para ampliar la base de suministro de proveedores de segundo y tercer nivel.