Debido a las acciones implementadas por el Gobierno Federal, en el periodo comprendido entre 2013 y 2014 la entrada de importados usados reportó una disminución de 6% en el segmento de vehículos pesados, pero aún así ingresaron 18 mil unidades el año anterior, explicó el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), Miguel Elizalde.
“Desgraciadamente la realidad es que México mantiene el nada honroso primer lugar en la importación de tractocamiones usados procedente de los Estados Unidos, lo cual impacta negativamente la competitividad del país y limita el potencial de la industria. Cada vehículo importado usado que ingresa significa un empleo menos”, indicó Elizalde.
Del total de unidades que entraron en 2014 procedentes de Estados Unidos, aproximadamente el 50% son tractocamiones, un 20% estaría representado por autobuses y el restante 30% de camiones. “Esto significa que por cada 10 camiones nuevos que se comercializan en el mercado nacional ingresan seis más usados”, agregó Miguel Elizalde.
“El espacio que ocupan los usados importados, lo pierde el mercado interno”, expuso el Presidente Ejecutivo de ANPACT. De regularse su entrada a México habría un área de oportunidad de producir hasta 20 mil vehículos pesados más. Un tema preocupante es que muchos de los pesados que ingresan aún tienen motores con tecnología EPA 98 que es altamente contaminante, cuando deberían entrar unidades solo con motores EPA 04.
Un área de oportunidad para evitar la entrada de este tipo de vehículos se encuentra en la recién autorizada NOM-068, de condiciones físico-mecánicas, que deben cumplir todos los camiones de carga que ingresen al territorio nacional. Una revisión exhaustiva de las condiciones físico-mecánicas, de emisiones, seguridad carretera y el medio ambiente podrían lograrlo.
Ligeros en niveles récord
Para nadie es un secreto la problemática que representa la entrada de vehículos usados al país, así como el daño que provoca en la industria nacional. Durante los últimos 10 años la cifra de usados ligeros (automóviles y vehículos comerciales) ha alcanzado 7.5 millones de unidades, con las consecuentes implicaciones en materias de seguridad y ambiental.
Al cierre de 2014 se importaron un total de 455 mil 372 vehículos ligeros, 29% menos que las de 2013, representando el 40% de las unidades nuevas comercializadas el año pasado, “afectando la renovación del parque vehicular al generar una importante sobreoferta en el mercado secundario de vehículos usados”.
Guillermo Prieto dijo que “no nos hemos pronunciado por cerrar las fronteras, estamos buscando que la entrada de usados sea de una manera ordenada. En 2014 se redujo la entrada de usados en 200 mil unidades respecto a 2013 gracias al esfuerzo de las autoridades, pero no podemos quitar el dedo del renglón”.
Por su parte, Eduardo Solís mencionó que es necesario mitigar la importación de “basura vehicular” para tener un mercado sano que permita una verdadera renovación de unidades. Reconoció el trabajo de la Secretaría de Hacienda y la Secretaría de Economía en la materia, pero reprobaron las manifestaciones que los comerciantes fronterizos han llevado a cabo para ejercer presión y mantener los amparos.
