La Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) dio a conocer la percepción de los industriales en torno a los resultados obtenidos en el primer trimestre del año, para obtener una radiografía de la actividad industrial en 2017, donde destaca que el balance ha sido positivo a pesar de todos los factores en contra que enfrentan a nivel nacional.
A pesar de los escollos que complicaron el panorama económico nacional y la certidumbre de los agentes económicos debido, entre otras cosas a la incertidumbre acerca del rumbo que tomarían las decisiones del gobierno de los Estados Unidos en materia comercial; al aumento en la cautela del consumidor final; al impacto del incremento en gasolinas, diesel, electricidad, gas natural, gas LP y tasas de interés; así como al retroceso en los niveles de confianza de los empresarios del país, el balance del primer trimestre del año arroja un saldo positivo desde la óptica de los industriales del sector manufacturero.
A la pregunta de ¿cómo calificarías al primer trimestre del año respecto al mismo lapso de 2016? el 45% de los participantes en el sondeo calificó como bueno el primer tramo del año, en comparación con el mismo lapso de 2016.
En segundo lugar y con el 34% de las respuestas, se encuentran los sectores que consideran que los primeros tres meses del año pueden calificarse como un periodo regular para sus actividades empresariales. El 14% de los encuestados señaló que se trató de un periodo malo y el restante 7% lo calificó como un excelente primer trimestre de año.
El comportamiento de los pedidos en el periodo referido ilustra en buena medida el comportamiento de la actividad industrial en lo que va del año. Alrededor de un tercio de los encuestados (34%) aseguró que no se registraron cambios en los pedidos recibidos y atendidos, respecto al primer trimestre de 2016. Para un porcentaje equivalente (34%) de los empresarios encuestados, sí se registró un descenso en los pedidos por sus productos y el restante 31% señaló que en el periodo enero-marzo del presente año se incrementaron los pedidos por sus mercancías.
Las ventas se mostraron un comportamiento dividido en dos grandes grupos: el primero integrado por el 38% de los encuestados que reportaron un descenso en las mismas respecto al mismo lapso del año anterior, mientras que para el 34% de los participantes ventas se incrementaron respecto a las registradas en el primer trimestre del año anterior. Por su parte, el 28% restante conservó el nivel de ventas reportado en los primeros tres meses de 2016.
La cobranza no se ha convertido en un obstáculo para la operación de las empresas del sector industrial. Para más de la mitad de los participantes (el 52%) la cobranza se mantiene normal. Sin embargo, poco menos de la tercera parte de los empresarios participantes, el 31%, aseguró que ésta se ha tornado más lenta. Por su impacto sobre la liquidez de las unidades productivas, este es uno de los indicadores que ameritan especial seguimiento a lo largo del año, porque será determinantes para conocer cómo se comporta el ambiente para hacer negocios en el país.
Para el cierre del año y de acuerdo con las expectativas de inversión, ventas, liquidez y rentabilidad, el 48% de los sectores anticipa un crecimiento en su actividad de hasta 3% respecto al resultado obtenido en 2016. Poco menos de la tercera parte, el 31%, anticipa un aumento en sus estadísticas de producción que oscilará entre 3.1% y 6% en relación el año anterior, y poco más de la quinta parte, 21% de los encuestados anticipa un retroceso en sus niveles de actividad al cierre de este año.