Luego de que los gobiernos de México y Brasil renegociaran el Acuerdo de Complementación Económica 55 (ACE-55) del 2002 para reducir las exportaciones mexicanas a ese país, en el caso de los vehículos pesados, aspecto que Brasil pugnaba para adelantar la apertura de 2020 a 2016, quedará pendiente de revisión.
De acuerdo con la Secretaría de Economía, en el tema de pesados “sólo se acordó llevar a cabo consultas para alcanzar un acceso recíproco y la homologación de las normas técnicas y ambientales”. Cabe recordar que en la actualidad, los camiones mexicanos que sean exportados al país sudamericano deben pagar 35% de arancel, en tanto que las importaciones de Brasil pagan un 20% en México.
Si bien no hubo representación oficial por parte de los fabricantes de vehículos pesados, en este caso a través de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), debido a que ésta permanece sin presidente ejecutivo desde el pasado diciembre, algunos directivos dieron su opinión al respecto de la entrada libre de pesados.
El director de proyectos especiales de Dina Camiones, Alejandro Ruiz, comentó: “Para nosotros, en el momento que se abra la frontera, vamos a estar preparados para poder competir en las mismas condiciones, porque somos una empresa competitiva, con un amplio portafolio, no nos preocupa quién entre al mercado. Nosotros necesitamos participar en un mercado globalizado, pero debemos de prepararnos para ir al día con la tecnología. Somos una marca competitiva”.
Por su parte, el director general de Navistar de México, Carlos Pardo, mencionó que si bien existe un tratado con Brasil que hoy día permite la importación y exportaciones de autos y refacciones, es hasta el 2020 que contempla la libre exportación e importación de camiones, “las negociaciones actuales son más en la parte de autos, la parte de camiones se espera que se quede igual hasta el 2020”.
Cabe destacar que respecto a la homologación de normas, Brasil desde enero de este año Entró en vigor la Norma de emisiones Euro 5. En tanto que en nuestro país permanecen vigentes las normas EPA 04 y Euro 4, con posibilidades de saltar a una nueva norma en cuanto se tenga disponible el Diesel de Ultra Bajo Azufre en todo el territorio.
Brasil pasó de la Euro 3 a la Euro 5. Su flota actual es de 2.2 millones de unidades a diesel, de las cuales se estima que el 28% no cumplen con ninguna norma ambiental, mientras que el 12% cumple la Euro 1, 26% la Euro 2 y 34% la Euro 3. Las tecnologías predominantes para la Euro 5 serán la EGR y SCR.
