Con 60 años de presencia en el transporte de carga regular, Transportes Mon-Ro se fundó por los dos hermanos Montemayor. Al inicio la administración se estableció de manera jerárquica a “las personas mayores en los cargos importantes o de dirección”.
Tras el paso del tiempo los roles fueron cambiando, las acciones pasaron a ser propiedad de solo uno de los dos hermanos, Rodrigo Montemayor, quien continuó el negocio con sus hijos y posteriormente sus nietos.
Perteneciente a la tercera generación de la empresa familiar Mon-ro, Rogelio Montemayor Morineau con 22 años de experiencia en la industria del autotransporte, reconoce que de manera conjunta “hermanos y primos estamos a cargo de un negocio, donde las mujeres de la familia no participan”.
Con 43 años de edad, el director comercial de la empresa, reconoce que el cambio realizado, durante todos estos años les ha obligado a pensar de forma “más institucional y dejar atrás a la familia. Ciertamente lograrlo no ha sido fácil, se requiere actitud y querer el negocio con una conciencia plena de avanzar”.
Actualmente “la misión es brindar un servicio de transporte que satisfaga las expectativas de los clientes a un costo competitivo a través de la mejora continua sustentada en el entrenamiento y participación de la gente”. Para ello, la empresa suma en su flota 550 tractocamiones, con una edad promedio menor a los siete años, y 1 mil cajas de 53 pies.
Con “capacitación y asesoría, tanto interna como externa, se busca que el personal de la empresa integre conocimientos que lo lleven hacia la forma de cómo satisfacer a un cliente, cómo mantenerlo contento”, pues sin ellos el negocio no existiría.
Por su parte, el gerente general de la empresa Manuel Montemayor, considera que la incorporación de tecnología en la administración, camiones, cajas, motores y mantenimiento ayuda mucho a tener presencia y crecer la intención de ganar participación de mercado y establecer la diferencia, pues si no somos capaces de innovar se corre el riesgo de quedarse atrás en este negocio y tener que cerrarlo”.
