La contaminación que producen los 181 mil camiones obsoletos en la República Mexicana es un problema que se puede evitar si el gobierno masifica el uso de diesel de ultra bajo azufre mientras se encuentran las herramientas que aceleren la renovación del parque vehicular nacional.
La propuesta la manifestó el director general de Volvo división camiones, José David Godinez, al revelar que estos vehículos reducirían hasta un 60% la emisión de contaminantes que producen diariamente con el uso de este combustible, “Por ello es importante que el gobierno trabaje en ofrecer este diesel para notar cambios importantes en materia ambiental”.
La Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) reveló que el Programa de Chatarrización renovó en cinco años 6% de los 181 mil camiones que se encuentran operando y considerados obsoletos, situación por la que el empresario afirmó que se tienen que establecer otras medidas para solucionar la cantidad de emisiones contaminantes que producen, ante la lenta transformación que existe.
“Es una preocupación que el programa de chatarrización no tenga el impacto deseado para estimular la renovación del parque vehicular y reducir la contaminación. Por ello lo importante es contar con otras opciones para cuidar el medio ambiente”.
El directivo reiteró la necesidad del gobierno de ofrecer este diesel para obtener no solamente resultados positivos en los equipos viejos, ya que los camiones nuevos tienen un mejor funcionamiento con este combustible.
A su vez, el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), manifestó que las autoridades de las entidades donde hay más flujo vehicular y transporte pesado, como el Distrito Federal o estado de México, deberían exigir al gobierno federal que imponga el diesel ultra bajo de azufre antes de 2010 para reducir la emisión de contaminantes.
Este diesel tiene entre 15 y 30 partes de azufre por millón, mientras que el combustible vigente contiene entre 350 y 500 partes por millón. Por lo que, si a la flota vehicular de autobuses del estado de México y el DF se aplica esa medida, además de un convertidor catalítico, esta región ahorraría 81 millones de dólares en salud, explicó la directora del programa Aire y Energía de Cemda Tania Mijares.
La NOM-86 establece la introducción del combustible de bajo azufre en los años 2006 y 2007 para los autobuses que circulen en la frontera hacia Estados Unidos para cumplir con su norma medioambiental por lo que existe la idea de que «Si se exige ese combustible para los camiones que van a ese país, también se debería hacer dentro de la República Mexicana”.