Durante julio de este año la venta al mayoreo de vehículos pesados alcanzó 2,563 unidades, cifra que comparada con las 1,971 registradas en junio de 2020 representa un incremento del 30.0%. No obstante, en los primeros siete meses del año las ventas al mayoreo suman 11,874 vehículos, un -56.3% si se compara con las 27,170 del 2019, según datos de INEGI en el Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Pesados y la ANPACT.
Al respecto Miguel Elizalde, Presidente Ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), dijo que “el mercado interno se encuentra aún muy por debajo de los niveles anteriores a la pandemia de Covid-19, en 2019 el promedio mensual de ventas al mayoreo era de 3,324 unidades mensuales, es decir estamos todavía 30% abajo, en el marco de una crisis más profunda que la del 2009”.
De acuerdo con la Estadística Básica de SCT-2019, México tiene 800,000 vehículos motrices con placas federales circulando en sus calles y carreteras con un promedio de 18 años de antigüedad. “Si México lograra su potencial productor, sería posible simultáneamente disminuir a la mitad la edad de la flota, bajar a menos de la mitad las emisiones y generar el doble de empleos”, dijo Elizalde.
“Renovar la flota tiene un efecto multiplicador sobre el bienestar social, ya que el autotransporte atiende todos los sectores y prácticamente todos los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de forma transversal,” continuó.
“Un vehículo pesado nuevo reduce gastos, aumenta seguridad vial y minimiza emisiones. El bienestar y la reactivación en México se mueven en vehículos pesados, por eso es indispensable implementar medidas que se vean reflejadas en el presupuesto de la federación de 2021 para que la reactivación no se quede sólo en buenas intenciones”, finalizó.