La entrada de camiones chatos al mercado nacional se convirtió en gran apoyo para las tareas de distribución de las empresas de mensajería. La experiencia de TresGuerras con el cambio de vehículos, de gasolina por diesel, significó ahorros de gastos en operación de 30%, mayor efectividad en las entregas en 99.9% junto con una mejor maniobrabilidad en las ciudades.
Fue hasta el 2005 cuando los chatos hicieron su presentación en territorio nacional, razón por la que la apuesta por estas unidades arrancó a partir de ese año, al presentarse como una inversión de alto rendimiento para la actividad, explicó el director de adquisiciones de la empresa, Jaime Almanza.
“Al no existir la opción de diesel para el reparto tuvimos que trabajar con gasolina en el pasado. La utilidad de estos camiones es inmensa para las entregas en ciudades y por ello trabajamos en que nuestra flota se conforme en su totalidad con chatos”.
Almanza reconoció que los motores a diesel, al igual que su mantenimiento tienen un costo mayor, pero se compensa ante los prolongados periodos que resisten antes de entrar al taller por lo que el factor no se considera una desventaja al compararlo con los motores de gasolina.
Con estos ejemplos la empresa comprobó que el rendimiento, en el uso del diesel, es 100% superior al de motores de gasolina -en todos los sentidos-, tendencia que muestran otras compañías que, aunque no son del mismo giro comercial, han invertido en estos camiones para usarlos en la distribución.
