Uno de los principales retos de los propietarios de vehículos seminuevos se encuentra en disminuir altos gastos de mantenimiento y lograr el mejor costo por kilómetro recorrido en sus vehículos de transporte, ya sea en aplicaciones de carga o pasaje.
El mantenimiento en las unidades seminuevas se reduce llevando un control en el mantenimiento preventivo, usando refacciones de equipo original para alargar la vida de los componentes y así evitar que continuamente entren a servicio por uso de refacciones de dudosa calidad, asegura el consultor especializado, Rafael Guillén.
Otra forma de apoyo es contar con mecánicos certificados, más que capacitados, para ciertos tipos de mantenimientos, ya que no es lo mismo realizar una media reparación que un cambio de aceite, abundó.
Al usarse refacciones originales, la vida útil de las unidades puede alargarse hasta en 60% en comparación con las que usan refacciones de dudosa procedencia y calidad. En ocasiones, “el cliente busca precio y no se fija cuánto es la vida útil que le puede dar a su unidad”.
También, al usar refacciones de equipo original y/o las que recomiende el fabricante, se eliminan tiempos muertos en taller o fallas que se presenten en carretera. En la actualidad los servicios de consultoría ofrecen una mejor rentabilidad al final de la operación a través de los siguientes eventos: localización de los gastos por mantenimiento, evaluación del tipo de refacciones que se usan, del precio y calidad.
El control a través de una bitácora de mantenimiento por unidad, ayuda a determinar el punto óptimo de reemplazo de componentes, evaluar el conocimiento técnico en marcas de productos que tienen sus mecánicos y/o talleres donde les realizan el mantenimiento a sus unidades, análisis del impacto financiero y contable que tiene el usar productos de baja calidad, incrementar su rentabilidad en costo por kilómetro recorrido y generar mayor flujo de efectivo.
Como ejemplo, si se está usando un aceite de baja calidad para la aplicación que tiene la unidad, esté puede mermar el rendimiento del motor afectando directamente a los inyectores y por consecuencia tener una media reparación antes del promedio normal de vida del motor, finalizó Guillén.
