El nuevo Presidente de Volvo México y Director General de Volvo Buses México, el mexicano Rafael Kisel, mencionó durante su presentación oficial que durante este año se invertirán cinco millones de dólares en mejorar las instalaciones de la planta de Tultitlán, Estado de México.
Su principal reto para los próximos dos años se basan en mantener a la marca en el número uno en el segmento de autobuses foráneos; incrementar la presencia en el segmento de autobuses urbanos y consolidar a México como el Centro Industrial de Volvo.
Destacó que en 2012, se incrementó a 32 el número de puntos de venta en la República Mexicana y en este año se sumarán cuatro más para un total de 36, con ello tendrá presencia en todo el país.
Rafael Kisel, mencionó que en el logro de estas metas jugarán un papel importante la innovación y las soluciones integrales al cliente, a través del soporte de la red de concesionarios de la marca y el incremento de los contratos de mantenimiento que estima en este año lleguen a mil.
De esta manera, se refuerza el compromiso de ofrecer los mejores autobuses foráneos que permiten a la marca conservar una participación de mercado de 40% y una participación de 75% en el servicio de Bus Rapid Transit.