Daimler Buses presentó su nuevo Future Bus que opera de forma autónoma, pero para que esto sea posible, además de un vehículo innovador es necesario que la línea BRT por donde circula también incluya desarrollos tecnológicos en el sistema de semáforos, por ejemplo. Así es como es posible que un BRT autónomo pueda ser una realidad.
El Future Bus incluye Diez cámaras pertenecientes a diferentes equipos y con tareas específicas asignadas, sistemas de radar de corto y de largo alcance, la fusión de los datos recogidos a través de estos equipos y una armonización con los valores memorizados, interconexión en red con semáforos y un equipo automático de frenos.
Todo esto constituye la base técnica del Mercedes-Benz Future Bus con CityPilot, necesaria para la conducción semiautomatizada en líneas BRT. El CityPilot es otro hito de Mercedes-Benz en la hoja de ruta para la conducción autónoma, se basa en el Highway Pilot del Mercedes-Benz Actros, pero supera sus posibilidades en su campo específico de aplicación.
Algunas novedades son el reconocimiento de semáforos, la función de detección de peatones, la aproximación a las paradas con una precisión de centímetros y la posibilidad de conducir en régimen autónomo parcial también al atravesar túneles. De ese modo, el autobús se hace uno con su ambiente. No sólo por su diseño, sino también con la técnica, que le permite moverse en su carril e intercambiar información con su entorno.
Líneas BRT especiales para la conducción autónoma
Una ruta siempre igual en un carril propio, un horario claramente definido, acciones inequívocas e idénticas en las paradas. Los autobuses urbanos en líneas BRT (BRT = Bus Rapid Transit) están predestinados para la conducción autónoma. Mercedes-Benz lidera ya la hoja de ruta para una conducción autónoma, tanto con sus camiones como con sus turismos. Nada más lógico que traspasar estos amplios conocimientos a los autobuses urbanos.
No obstante, los autobuses están sometidos a condicionamientos específicos en su utilización que no permiten asumir sencillamente la técnica de otros sistemas de tráfico: es necesario desarrollarla y completarla en algunos aspectos decisivos para las condiciones particulares de uso.
Esto afecta tanto a situaciones típicas del tráfico —los semáforos, la detección de peatones, los vehículos precedentes en el mismo carril, el paso por túneles y la conducción en cruces regulados por semáforos— como la aproximación a las paradas, la apertura y el cierre automáticos de las puertas para los pasajeros y la puesta en marcha a continuación.
CityPilot, el corazón del Autobús del Futuro
El campo de utilización de un autobús urbano requiere un equipamiento técnico específico para la conducción autónoma. La técnica para la percepción del entorno y la calzada es extraordinariamente compleja. Mercedes-Benz se beneficia de la experiencia recogida con el Future Truck.
Esto afecta, por ejemplo, al radar de largo alcance, con un campo de exploración de hasta 200 metros, a la dirección Servotwin con regulación eléctrica y a las «mirrorcams» o cámaras-espejo que sustituyen a los retrovisores exteriores.
También es conocida la cámara para detección de carril, que se utiliza en otros autobuses, autocares y camiones de Mercedes-Benz como componente del detector de carril implementado en estos vehículos. Una segunda cámara para detección de carril aporta seguridad adicional.
Cuatro sensores de radar de corto alcance —dos en el frontal y otros dos en las esquinas delanteras del vehículo— cubren la zona situada entre 50 cm y 10 m por delante del autobús. Dos cámaras estereoscópicas con un alcance máximo de 50 m hacen posible una visión espacial y facilitan la detección de obstáculos y de peatones.
Posicionamiento exacto
Para el posicionamiento exacto del Future Bus se utilizan el sistema de localización basado en satélite GPS, las cámaras de detección de carril y cuatro cámaras para localización visual global. Estas cámaras se montan en los laterales, por encima del eje delantero, desde donde exploran el entorno y lo comparan con fotografías memorizadas.
De ese modo se logra un posicionamiento exacto, basado en determinadas marcas en la ruta. Trabajan con una precisión de ocho centímetros y se utilizan también en túneles iluminados. Este tipo de cámaras se emplearon por primera vez hace tres años, durante el recorrido autónomo de un modelo preparado de la Clase S de Mercedes-Benz en la ruta histórica de Bertha Benz.
Otras dos cámaras de corto alcance se montan en los laterales del frontal, y están dirigidas en vertical hacia abajo. Estas cámaras reconocen la textura superficial del asfalto, como si fuera una huella digital, y la comparan continuamente con fotografías memorizadas previamente del trayecto. A esto se añaden tres cámaras para documentación de todos los eventos durante la conducción. Estas cámaras registran los movimientos del autobús y del conductor.
Mediante una compleja fusión de los datos de estos sensores se obtiene una imagen muy precisa del entorno y se determina la posición exacta del autobús en el mismo. Esto le permite desplazarse en su carril con una precisión de pocos centímetros, mayor de la que puede garantizar a largo plazo cualquier conductor en el tráfico cotidiano.
La interconexión digital en red con la infraestructura de los semáforos a lo largo de la ruta asegura la detección temprana de sus señales y permite así un estilo de conducción anticipativo, a velocidad homogénea, que resulta por tanto, más económico que en un autobús convencional.
Interconexión en red
El resultado de la interconexión en red del autobús con el entorno del tráfico es una nueva dimensión en su rendimiento como medio de transporte. El conductor recorre la ruta completa de forma semiautomatizada sin tener que accionar la dirección, el acelerador o el freno, y ni siquiera el pulsador para apertura y cierre de las puertas. Esto facilita enormemente su trabajo en el servicio regular.
En realidad, el Mercedes-Benz Future Bus se encuentra en el nivel dos de las cinco etapas definidas en la hoja de ruta para una conducción autónoma. Este nivel incluye una automatización parcial con función de control de carril, regulación de la velocidad, aceleración y maniobras de frenado con ayuda de los sistemas de asistencia a la conducción.