El sector de autopartes para camión ha sido de los más afectados por la crisis económica “porque tiene doble o triple efecto, ya que un camión a diferencia de un coche es un bien de capital que compran inversionistas pequeños o flotilleros, y para ellos necesitan crédito a nivel mundial, pero este también está parado”, comentó el presidente ejecutivo de la Industria Nacional de Autopartes, Agustín Ríos Metence.
“La industria automotriz actualmente no está bien calificada para recibir créditos por su problema de flujo de efectivo y al estar más calificada no pueden disponer de prestamos y ahí se crea la cadena completa, las distribuidoras no pueden vender, los fabricantes no ensamblan y a nosotros no nos pagan a tiempo y entramos en problemas de liquides”.
Asimismo, Ríos Matence comentó que “son el primer eslabón de la cadena automotriz, con varios mercados: el primero es el de fabricantes de vehículos establecidos en México y el extranjero, así como el de refacciones tanto del mercado doméstico como de exportación”, pero que actualmente todos están a la baja.
“El mercado de refacciones es creciente por el aumento en la venta de unidades año con año, no con crecimientos muy grandes pero sí entre el tres y cinco por ciento. Tenemos un problema no sólo a nivel nacional sino mundial, entonces pues lo mismo que les está pasando a los fabricantes, lo padecemos nosotros”, añadió.
“El problema no sólo es México, sino que no tenemos demanda en el extranjero, el 60% de la producción de autopartes se destina a la exportación, el año pasado se exportaron 17 mil 500 millones de dólares, pero ahora no hay demanda, sólo exportamos en función de lo que se va requiriendo”, finalizó.