Con desánimo recibió la industria automotriz mexicana el anuncio realizado por el Presidente de la República, Felipe Calderón de la puesta en marcha del Programa de Renovación Vehicular en el país, ya que solamente incluye a una parte de los fabricantes de automóviles.
Con un monto de 500 millones de pesos que podría en el futuro ampliarse a mil millones de pesos se otorgara un bono de 15 mil pesos en la compra de un vehículo nuevo, cuyo valor no exceda los 160 mil pesos.
El programa no incluye al segmento de vehículos pesados, que a decir de especialistas cuenta con su propio programa. Cabe destacar que desde su implementación en mayo de 2004 sólo se han chatarrizado 10 mil 018 unidades que frente a los 186 mil con más de 20 años de antigüedad representa un 5%, es decir en cada uno de los años del programa la tasa representa el 1%. Sin duda alguna la industria esperaba un poco más.
Un analista especializado en la industria automotriz, que pidió el anonimato, comentó en entrevista “este es un programa ridículo”. La meta es captar entre 22 mil y 25 mil unidades que serían destruidas, misma cantidad de compradores que serán beneficiados, lo cual es aún bajo considerando que este año esperan ventas por 730 mil 750 unidades.
Los 500 millones de programa, serán para ejercerse durante 2009, con la idea de que el programa continúe en 2010, con un mayor alcance.
“Dependiendo de los resultados, que seguiremos con particular interés, podría ampliarse a mil millones de pesos”, aseveró Calderón ante los ejecutivos de empresas automotrices, distribuidores y autopartistas.
El jefe del Ejecutivo explicó que los propietarios de vehículos chatarra podrán llevar sus unidades a depósitos para reciclaje o para ser destruidos a partir de lo cual se les entregará este financiamiento de 15 mil pesos.
Guillermo Rosales, director de enlace de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), explicó que financieras de las marcas, así como bancos, evaluarán si los clientes son susceptibles de créditos, pero al que no lo sea, Nacional Financiera respaldará al acreditado mediante un esquema de garantías. Detalló que esto funcionará en automático y los clientes harán los trámites en las agencias.
Agustín Ríos Matence, presidente ejecutivo del Instituto Nacional Autopartista (INA), dijo que el plan ayudará aunque en el volumen parezca poco. Descartó que la mayor parte de los vehículos que se vendan mediante este esquema sean orientados sólo a autos hechos en México.
“Aquí el punto es que importamos 75% de los coches que aquí vendemos desde países que son socios comerciales nuestros. Si cerramos la puerta a autos hechos afuera nos vamos a cerrar también la puerta y dónde (sic) nos vamos a recuperar. Tenemos que ser congruentes, estamos en una industria muy globalizada y se juega con otras reglas”, dijo.
El presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) Eduardo Solís, calificó de positivo la puesta en marcha del programa, pero aclaró que se trata de un “piloto” al que todavía le faltan detalles para ponerlo en marcha y ver cómo quedarán las reglas de operación.
De acuerdo con el informe del despacho de actuarios Melgar y Asociados, en México circulan más de 10 millones de automotores (incluidos camiones pesados) tienen más de 10 años de antigüedad.
La edad promedio del parque vehícular mexicano es de 16.34 años. Para el próximo año se espera que esta edad sea de 16.42 años. (Con información de Jorge López y Sergio Jiménez)
