De acuerdo con información de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) del total de accidentes ocurridos en el país, en el 14% aproximadamente se involucran vehículos de carga o pasaje con defensa trasera inadecuada.
De ahí la necesidad de implementar una norma que establezca las dimensiones que permitan que el impacto de un automóvil contra la defensa del remolque sea a la altura en que se diseñan éstos para resistir los impactos.
Durante la reunión anual del TMC de México, el gerente general de Resalta-Hyundai, Carlos Legaspi, reconoció en este un tema simple pero trascendente por los problemas de seguridad que genera, así como la urgencia de corregirlo.
Las condiciones de resistencia de las defensas deben soportar el golpe del vehículo y resistir la posibilidad de que el mismo se incruste por debajo del camión provocando accidentes fatales en los ocupantes.
Carlos Legaspi, reconoció que ante la ausencia de una norma, en los llamados accidentes de alcance los vehículos acaban “incrustándose en la parte trasera del remolque o del camión”
Los reportes oficiales de la causa del mismo establecen que el conductor se distrajo al hablar por celular u otra cosa y esto puede ser cierto, “el automovilista choca, pero no debiera morir”, si los remolques y camiones estuvieran equipados con una defensa trasera a la altura adecuada y con la resistencia adecuada, con lo cual se salvarían muchas vidas.
