Pese a todos lo retos que se presentan para la operación del transporte terrestre debido a la crisis sanitaria provocada por el Covid-19, la pronta respuesta a la demanda y adaptación al cambio, son clave para mantener el abastecimiento de los artículos de primera necesidad durante toda la pandemia.
Debido a los cierres totales y parciales de diferentes sectores que se han implementado en algunas de las entidades del país, se presenta un nuevo desafío en cuestión de la distribución de las mercancías lo cual tiene una implicación directa en el transporte.
“La cuestión con el fenómeno de las restricciones radica principalmente en `las ventanas de tiempo´ las cuales afectan directamente a los proveedores, al tener que adaptarse a los nuevos tiempos y condiciones de entrega, y a las empresas al momento de implementar nuevos sistemas de organización así como implementar los protocolos de salubridad e higiene”, comentó Fernando Noriega, Director General de Idealease de México.
añadió que “los tiempos para las acciones de logística como: cargas, entregas, revisiones, descargas y devoluciones, se están reduciendo, lo que provoca que se tenga que mover las mismas cantidades de mercancía en lapsos más cortos”.
Desde el inicio de la pandemia el transporte de carga se considera una actividad esencial en la cadena de suministro. Hoy en día, en la operación, el número de personas asignadas para realizar los procedimientos logísticos de mercancías en bodegas, andenes, zonas de carga-descarga y operadores se encuentra muy limitado, y aunque las medidas de restricción en las ciudades varían, este cambio lleva a las empresas a ser más eficientes en su operación logística así como ampliar temporalmente sus flotas.
“El retorno a la regularidad en el transporte se dará de manera paulatina, en Idealease continuamos con las implementaciones de salubridad necesarias para evitar la propagación del Covid-19 como son la sanitización de los camiones cada que entran a taller así como cuando se ponen en servicio nuevamente, el uso de cubre bocas, el lavado constante de manos, y el distanciamiento de técnicos y operadores seguirán vigentes”, explicó Noriega.
“Con las restricciones en diversas ciudades se modifican las actividades comerciales y de servicios a lo que en la industria del transporte tenemos que reaccionar de manera eficiente para asegurar el abastecimiento oportuno de mercancías y servicios al consumidor final”, concluyó el directivo.
