Para las empresas del sector no es suficiente tener un buen producto o el reconocimiento de la marca, además necesitan generar valor a través de su personal. De ahí que algunas armadoras hayan dado oportunidad a jóvenes proactivos que combinan sus talentos con ejecutivos maduros creando una sinergia de experiencia e innovación en beneficio de lograr mayores ventas de unidades.
La calidad de la manufactura automotriz mexicana ha hecho posible que las diferentes armadoras en nuestro país lo consideren la plataforma ideal para que la fabricación de algunos de sus vehículos vendidos alrededor del mundo se produzcan de forma exclusiva en plantas mexicanas.
En el segmento de vehículos pesados, la industria terminal ha alcanzado un importante nivel de desarrollo con actividades que van desde ensamble, estampado y carrocería, produciendo una amplia gama de modelos que satisfagan la demanda interna y externa, con base en el incremento de eficiencia y productividad.
Por el momento histórico que México vive como fabricante automotriz a nivel mundial, la capacidad para desarrollar y manufacturar productos de alta tecnología con calidad e innovación, ha llamado la atención de inversionistas que apuestan por el país. Sin embargo, las cada vez más altas exigencias de producción, medioambientales y de seguridad, requieren de talento humano estratégico mejor preparado y capaz de enfrentar estos retos.
Con el contexto enmarcado por la globalización de los mercados, el principal desafío para la sostenibilidad de las armadoras en México se encuentra en mantener sus ventajas competitivas en términos de tecnología, reconocimiento de la marca, costos y el único factor que puede capitalizar estos atributos es el talento del capital humano.
En este proceso de crecimiento es necesario contar con gente proveniente de las universidades y escuelas técnicas instaladas en el país, personal especializado donde directivos, ingenieros, técnicos y obreros mantengan el perfil requerido en los diferentes niveles de conocimientos, capacitación y/o entrenamiento.
Para el Socio Líder de Asesores de KPMG en México, Víctor Esquivel, “la guerra por el talento implica atraer, retener y motivar al personal de alto rendimiento y vincular sus objetivos con las metas de la compañía”, señaló en entrevista con Indicador Automotriz.
Ellos son “los motivadores de la mejora de la rentabilidad en las organizaciones, en las empresas de servicio o contacto son la cara hacia el mercado y ellos son los que atraen, retienen y mantienen y satisfechos y contentos a los clientes”.
Anteriormente, en la industria automotriz y del autotransporte, ambas con un cierto nivel de posicionamiento en el mercado, parecía que el tema de preferencias lo establecían “elementos de competencias, análisis y potencialización de capacidades dentro de un mercado cautivo”. Empero, la globalización de los mercados provocó cambios en la forma de demanda y exceso de inventarios en algunas marcas, debido a que los clientes dejaron de comprar sus unidades…
El reportaje completo en nuestra edición impresa de junio.
