Frente al chantaje que implicaría el cierre de garitas, por parte de importadores de vehículos usados, la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT) hizo un llamado al Gobierno Federal, a la industria y a la ciudadanía, a no bajar la guardia frente a este tipo de presiones.
“Nuestro país es reconocido como una plataforma global de producción y exportación. Desafortunadamente, en el camino de la competitividad a México se le ha atravesado el coyotaje del que viven de introducir vehículos viejos, obsoletos, contaminantes e inseguros” expresó su Presidente Ejecutivo, Miguel Elizalde Lizárraga.
Para los productores nacionales de vehículos pesados, las manifestaciones que pretenden canonjías y privilegios para los importadores de usados chatarra, pegan directamente al flujo de exportaciones e incluso, al flujo de material de algunos insumos de Estados Unidos.
“Las familias de los 144 mil trabajadores de la industria automotriz de vehículos pesados y el 5.2% del PIB manufacturero que genera la producción de camiones, tractocamiones y autobuses en México, pesan más que el coyotaje y la irregularidad. Nuestro país puede y debe renovar la flota, no sólo por buenas razones económicas, sino para cuidar el medio ambiente y cerrar el paso a las prácticas irregulares que acompañan a un vehículo chatarra” expuso Elizalde.