En México más del 6% de los accidentes vehiculares en las carreteras federales a lo largo del año son provocados por las lluvias, advirtió el Centro de Experimentación y Seguridad Vial, (Cesvi México), aunque considera que el 75% de los accidentes vehiculares producidos durante la conducción en lluvia son evitables tomando precauciones.
Con base en datos del INEGI, el 7% de los accidentes vehiculares en carreteras del país tienen su origen en agentes naturales, dentro de los cuales la lluvia representa más del 90% de los percances.
Debido a lo anterior, el organismo especializado en investigación sobre siniestralidad automotriz, considera que es necesario llevar a cabo diversas acciones de seguridad para evitar que en esta temporada de lluvias que se avecina se incremente el número de accidentes en vías federales y de cuota del país.
El primer consejo que debe tomarse en cuenta es tener sentido común y precaución. Al llover, el agua se mezcla con la suciedad y el aceite, creando las condiciones perfectas para derrapar.
La mejor forma de evitar lo anterior es reducir la rapidez al manejar, asegura Cesvi México. Por lo que se recomienda conducir a baja velocidad, para que la banda de rodadura del neumático este en contacto con el pavimento, lo que nos permitirá mayor tracción y respuesta de frenado.
Si al circular el agua no es correctamente despejada por el dibujo del neumático, cualquier acción de frenado producirá el llamado aquaplaning; ante esta situación y para disminuir el riesgo, en la medida de lo posible se debe evitar pasar por los charcos y reducir la velocidad.
Es importante mantener los limpiadores en excelentes condiciones ya que cuando el agua choca contra el parabrisas se reduce la visibilidad, ocasionando condensación de vapor y empañamiento por dentro. Ante esta situación se deben encender las luces, usar el aire acondicionado para desempañar y mantener limpios los vidrios. Nunca pase la mano en el parabrisas ya que se puede dejar grasa, lo que puede complicar la visibilidad.
Los indicadores muestran que en un 80% el mal estado de los neumáticos y sumado a otras circunstancias como la velocidad o malas maniobras en situaciones críticas, son causa de accidente.
En estas circunstancias, más allá de su diseño, lo principal es que cuenten con la profundidad de dibujo adecuada: 1,6 mm. Así como revisar que la presión de los neumáticos siempre se encuentre dentro de los valores definidos por el fabricante.
En resumen, las recomendaciones son: Reducir la velocidad, con piso mojado hay que aumentar la distancia con respecto al vehículo que va adelante, mantener un nivel de atención y precaución extra, realizar desaceleraciones suaves y progresivas, en caso de mucha lluvia, encender las luces antiniebla delanteras y traseras; y revisar frecuentemente la presión y estado de los neumáticos, así como mantener en óptimo funcionamiento los limpiadores.